sábado, 12 de marzo de 2016

Muchas veces intentas explicar un sentimiento y te salen como explicar todos los demás menos ese.
Intentas definirlo con tu vocabulario, expresarte lo mejor posible, pero te das cuenta de que no hay ninguna palabra que defina lo que sientes. Sólo se acerca a ello, se asemeja.

Nunca antes en mi vida me había sentido así, creía que estar enamorado significaba otra cosa distinta a lo que realmente significa. No sabía que era encontrar tu todo en alguien, que no necesitaras nada ni a nadie más. Que fuera  tu complemento, y directo. Que lo que había que sentir no fueran maropositas en el estómago, sino elefantes. Que el pasar horas sin hacer nada, tirados en el sofá, fuera uno de los mejores planes que podía haber. Siempre y cuando eso conllevera estar abrazados y koaleando. Y ahora lo se, ahora se lo qué es el amor. Se lo que es amar sin que importe nada más. Se lo que es estar tan enamorado hasta el punto de no tener dudas de nada, tan seguro de esto, que sabes que va a durar mucho, hasta el punto (y aunque suene cursi) de ser eterno.

Nadie es perfecto. Todos somos humanos. Nos caemos, nos levantamos y si es necesario, nos volvemos a levantar.
Aprender de nuestros errores para no volverlos a cometer y seguir adelante.
Que todo camino tiene piedras y que la montaña no se escala en un día.

Tenemos la mala costumbre de querer que todo salga bien a la primera, de que todo vaya perfecto y sobre ruedas y de que la gente sea perfecta y no cometa errores. Pero nos olvidamos de que somos seres humanos.

jueves, 26 de noviembre de 2015

Me quedaría mirándote horas y horas, días, semanas... sin necesidad de hacer nada más. Es tan bonito cuando te puedes quedar a vivir en los ojos de alguien... que ese alguien te transmita tanto con la mirada. Y sonreís. Y reís. Y al instante os besáis. Y qué bonito. Qué bonito estar con él, formar un "nosotros". Quererse. Hasta el punto de no necesitar nada más. Solo a él. A su amor.

sábado, 24 de octubre de 2015

22

Si tuviera que resumir nuestra historia en unas líneas sería incapaz. Hemos vivido, y seguimos viviendo, tantas cosas en el poco tiempo que llevamos que me sorprendo, me sorprendo para bien.
No hay nada más bonito que querer y ser correspondido. No hay nada más precioso que quedarte embobada mirando a esa persona según te cuenta cosas tan interesantes que ni sabías. No hay nada mejor que pasar horas muertas, pero con él, aunque sea sin hacer nada, mirándonos, besándonos, abrazándonos... pero sin duda...no hay nada más bonito que estar con él y querernos, sin que no importe nada más. Y me encanta.

martes, 4 de agosto de 2015

Igual que vino se fue

Voló. Vi como todos los recuerdos iban desapareciendo, como se iban marchitando, como se iban volando a quien sabe donde... Reconozco que sufrí. Soy humana. Nadie es de piedra, ni la persona que jamás se ha enamorado lo es, cosa que es difícil, el no enamorarse. Enamorarse...que palabra tan grande y tan maravillosa que abarca tantas cosas y a la vez son tan pocas las que te hacen sentirlo por alguien...

Nunca imaginé que podría llegar a querer así, como quise. Sin miedos. Sin agobios. Sin presiones. Un amor sincero. De verdad. Por los que el luchar es algo bonito. De esos que te hacen crecer como persona individual, y como no, conjunta. De los que te cuidan, te respetan y te apoyan. Un amor correspondido.

Y se acaba. Todo se acaba de repente, en el momento en el que menos lo esperais, o quizás en el que más debía de pasar. Acaba igual que empieza, entre un suspiro, en un segundo, entre café y copa o porqué no, tras un beso. Un beso de despedida. El beso en el que te das cuenta de que ya ha llegado el momento, de que todo ha acabado interiormente. De que ese gran amor que te hacia sentir viva, ha llegado a su fin. Y duele. Y lloras. Y sufres. Pero es lo mejor.
 Que igual que vino, se fue.

lunes, 29 de junio de 2015

Gracias

Han pasado semanas, meses, años desde que escribí por última vez aquí, y la verdad que me arrepiento de no haber seguido con esto, ya que me llena y me ayuda de alguna forma a sentirme mejor, y más ahora que en un par de meses empiezo con la carrera de mis sueños; periodismo.

Han llegado a mi vida muchas nuevas caras, y también se han ido otras...quizás aún me duele cuando pienso en esto porque aunque no esté todo tan reciente como hace un tiempo, aún me da pena.

Muchas veces echar de menos y derramar lágrimas por seres queridos, que han sido tan importantes en tu vida es algo bueno. Siempre está bien tener ese buen recuerdo de personas que nos han hecho crecer en todos los sentidos, que han estado tanto en nuestros momentos mas difíciles como en otros mas fáciles, que nos han visto conseguir sueños y que nos han ido apoyando en todas y cada una de nuestras metas, y todo ello con una gran sonrisa. Doy las gracias a esas personas, y sobre todo a ti, por haber hecho de este año tan duro y tan feo para la mayoría, un gran año para mi, adornando mis días, tardes y noches.
Quizás mi problema ha sido que nunca he cerrado etapas en mi vida y siempre han quedado cosas abiertas por decir o por hacer, hasta el punto de que haya pasado todo esto.
Llega un momento en la vida de una pareja que ya no se puede sujetar con amor, necesitas más cosas, por mucho que ames a tu compañero necesitas admirarle, si, esa es la palabra que mas se asemeja a lo que siento. Necesitas ver en él cosas de las que estar orgullosa, necesitas verle progresar, crecer como persona al igual que lo haces tú. Que si, que el amor lo es todo, pero con el paso de los meses te das cuenta de que no, que es una parte importante en una relación pero no la única. Y da pena, mucha pena, cuando te das cuenta de esto, y de que nadie te va a mirar con esos ojos, ni a querer como él lo ha hecho. Pero necesitas más.

Finalmente, solo podemos agradecer a esas personas por aparecen en nuestra vida en los momentos que mas lo necesitamos y por habernos dado ese apoyo en todos los sentidos, haciéndonos crecer como personas y descubrir que realmente valemos la pena.

sábado, 27 de octubre de 2012

Changes

Este tiempo ha dado mi vida un giro inesperado, han cambiado tantas cosas en tan poco tiempo... he olvidado, he recordado, he reido, llorado...

Ha llegado un momento en mi vida en el que me he dado cuenta lo que quiero y como lo quiero. Basta de no ser feliz, de no exprimir la vida al máximo, basta de malos días, de llorar de tristeza, de rayarme y de preocupaciones innecesarias.

Quiero ser completamente feliz ya, pasármelo bien con la gente que me quiere, quererle mucho, dar todo de mi, exprimir cada segundo como si fuera el último, vivir al límite, quiero poder decir "ya no eres tan importante para mi, te olvidé, te han sustituido y de qué forma..." y ha llegado el momento en el que lo soy, lo he hecho, he vencido mis miedos, he reido solo por no llorar, he aprendido de mis errores y me he levantado una y otra vez.